Un flujo de trabajo consiste en una secuencia de pasos o actividades que deben completarse para ejecutar con éxito una tarea específica. Estos procesos describen las acciones, las responsabilidades y los plazos necesarios para llevar a cabo un trabajo concreto, garantizando que las tareas se realizan de forma eficaz, segura y en el orden deseado.
Fases de los flujos de trabajo en Industria
En un entorno industrial, un flujo de trabajo tiene las siguientes fases:
• Inicio del trabajo: una orden de trabajo, una solicitud de mantenimiento o un programa de producción, por ejemplo, señalando el propósito, el alcance y cualquier otro requisito específico que se necesite.
• Planificación del trabajo: aquí se identifican y asignan los recursos, equipos, materiales y personal necesarios.
• Preparación previa al trabajo: esto puede implicar la realización de evaluaciones de seguridad, la obtención de permisos o aprobaciones, la recopilación de herramientas y materiales, y la garantía de que todos los recursos necesarios están disponibles y funcionan correctamente.
• Ejecución del trabajo: el personal o equipo asignado sigue los procedimientos planificados, realiza las tareas requeridas y lleva a cabo las acciones necesarias para completar el trabajo.
• Documentación e informes: registro de los detalles del trabajo, las actualizaciones del progreso, cualquier desviación del plan, las tareas completadas, las observaciones y cualquier dato o medida relevante.
• Control y garantía de calidad: dependiendo de la naturaleza del trabajo, las medidas de control de calidad pueden integrarse en el flujo de trabajo. Esto implica inspecciones, pruebas o verificación del trabajo realizado.
• Finalización y entrega del trabajo: verificación de que se han completado todas las tareas, asegurarse de que el equipo y las herramientas se devuelven a sus ubicaciones designadas y realizar cualquier limpieza necesaria posterior al trabajo.
• Evaluación y mejora continua: es esencial evaluar su rendimiento global, incluidos factores como la seguridad, la eficiencia, la calidad y el cumplimiento de los plazos.
Un flujo de trabajo bien definido proporciona un enfoque sistemático para ejecutar tareas en el sector industrial, garantizando que los trabajos se lleven a cabo de forma eficaz, con una planificación, ejecución, documentación y evaluación adecuadas. Esto ayuda a mantener las normas de seguridad, optimizar la productividad y lograr los resultados deseados en un entorno industrial.
¿Cómo orquestar flujos de trabajo?
orquestar flujos de trabajo
Orquestar flujos de trabajo implica coordinar y automatizar la ejecución de múltiples tareas o procesos para lograr un resultado deseado. A continuación se indican los pasos que le ayudarán a orquestar eficazmente los flujos de trabajo:
1. Definir los objetivos del flujo de trabajo: es primordial comprender la finalidad de cada tarea y el resultado deseado del flujo de trabajo global. Esto guiará esfuerzos y ayudará en el diseño del flujo de trabajo.
2. Mapear los pasos del flujo de trabajo: visualizar la secuencia de tareas y sus dependencias. Para ello, es necesario crear un organigrama o diagrama para describir los pasos del flujo de trabajo, incluidos los puntos de decisión, los procesos paralelos y las ramas condicionales. Esto proporcionará una visión clara de la estructura del flujo de trabajo.
3. Identificar las dependencias de las tareas: determinar las tareas que deben completarse antes de que puedan iniciarse otras, así como las tareas que pueden ejecutarse simultáneamente.
4.Automatizar la ejecución de tareas: aprovechar las herramientas de automatización o el software de gestión de flujos de trabajo para automatizar la ejecución de las tareas.
5. Asignar responsabilidades: asignar funciones y responsabilidades a las personas o equipos que participan en el flujo de trabajo. Es necesario comunicar claramente las expectativas, los plazos y los entregables para asegurarse de que todo el mundo comprende sus funciones y sabe lo que se espera de ellos.
6. Supervisar y controlar el progreso: se debe contar con un sistema para supervisar y realizar un seguimiento del progreso de cada tarea y del flujo de trabajo general.
7. Mejora continua: revisar y analizar periódicamente la eficiencia y eficacia del flujo de trabajo. Recopilar información de las partes interesadas, identificar áreas de mejora y aplicar mejoras para optimizar el flujo de trabajo a lo largo del tiempo.
8. Comunicación y colaboración: fomentar la comunicación abierta y la colaboración entre los miembros del equipo implicados en el flujo de trabajo, mediante instrucciones claras.
Siguiendo estos pasos, la orquestación de los flujos de trabajo garantiza que las tareas se ejecuten de forma coordinada y optimizada, lo que redundará en una mayor eficacia, productividad y resultados satisfactorios.
4Action, la solución de Zerintia Technologies para la orquestación de flujos de trabajo
4Action es la plataforma de Zerintia Technologies que permite la orquestación de flujos de trabajo, ya que integra los datos generados en la planta industrial de distintas fuentes, como las Tecnologías Operativas (OT), las Tecnologías de la Información (IT) y la información relativa a los empleados, para la detección de eventos en tiempo real.
